viernes, 5 de septiembre de 2008

Cuando pequenia aprendí a contar buscando monstruos.

Ahora no hai migas debajo de la cama terrible,
ni en el armario terrible,
ni en el lago,
ni en el saco terrible.

Estas paredes no se convirtieron en el mundo entero.
(me ievo las gaietas)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pongase de nuevo el traje de lobo, pequeña PI, para que los bosques broten bajo su cama, y vuelva ser nombrada monstruo más monstruo.
Nosotros rugiremos cuando se marche a cenar.

kule dijo...

Es ese modo tan peculiar tuyo de decir las cosas... Bonito texto. Acabas de ganarte el derecho a conocer a mi tricky. ez maz mono..chau pi